Con personería jurídica y patrimonio propio, se logra que en el mes de agosto del año 1975 se expidan las licencias de funcionamiento a través de los acuerdo 186, 187 y 188 de la junta directiva del ICFES; para entonces surgía la idea y la necesidad de transformar el naciente Instituto Tecnológico en una verdadera universidad, y quienes toman esta bandera son los profesores y estudiantes, que en el afán de alcanzar metas superiores, motivaron a la clase dirigente del Cesar para conseguir dicho propósito.